Vistas a la página totales

miércoles, 30 de septiembre de 2015

EN EL MES DE LOS MILAGROS (poniéndosela difícil al Cristo Morado)

 
 
                                                               Carlos Raúl Paredes
 
Octubre, mes morado. Y mientras que los fieles se visten de morado, demorado está el avance del país, demorado está aquello que prometió el presidente Humala de mantener los precios de los productos de primera necesidad, demorado está el solucionar la inseguridad y la violencia ciudadana, demorado está el defender los intereses del pueblo en temas como minería, petróleo y otros recursos....
 
Hasta el proceso de investigación de las agendas de la First Lady está demorado, mientras que la susodicha estaría aprovechando el tiempo para recibir clases intensivas de Grafoterapia que le permitan reaprender a escribir y así reeducar su puño y letra.
 
Por si fuera poco, demorado está el proceso de investigación de lavado de activos, mientras que la primerísima estaría aprovechando el tiempo para hacerse la manicure y así mantener sus uñas largas, pero bien cuidadas.
 
Demorado, todo está demorado en el Perú porque las prioridades del Gobierno son otras muy diferentes a las de la gran mayoría de peruanos.
 
Y a nosotros, los fieles devotos que por lo general cada 5 años metemos la pata en cuestión de votos, en este octubre solo nos queda vestirnos de morado y rezar por un milagro: que los próximos 6 meses se pasen volando porque, valga la paradoja, el Perú no es un avión que se maneje con piloto automático como viene ocurriendo.
 
Señor de los Milagros, te pedimos que intercedas por nosotros para que el próximo gobierno retome el camino del progreso y desarrollo con eficacia y sin retardos.
 
Que el próximo presidente o presidenta tenga los pantalones bien puestos y que, para empezar, gobierne a su primera dama o primer damo (según sea el caso).
 
Que lo primero en su agenda NO sea el enriquecimiento a costa de todos los peruanos.
 
Que NO nos incumpla la promesa de mantener los precios de los productos de primera necesidad. (En pocas palabras, que NO prometa lo que no está a su alcance poder cumplir).
 
Que NO le tiemble la mano, que NO le gane la ineptitud para solucionar la inseguridad y la violencia ciudadana.
 
Que SÍ defienda los intereses del pueblo en temas como minería, petróleo y otros recursos, sin ser ni chicha ni limonada, como pasa en la actualidad.
 
¡Gracias por escuchar nuestras plegarias Señor de los Milagros!
 
Sabemos que te la estamos poniendo difícil... que los milagros con políticos son los más complicados en tu larga lista que incluye aquel milagro del Terremoto de 1655 o el milagro a Antonio de León en 1670, entre muchos otros. Por eso, para que lo logres, estampita en mano también rezaremos por ti.
 
Y mientras esperamos las próximas elecciones, la procesión va por dentro...
 
 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario